Argentinos Juniors arrancó con todo ante Aldosivi pero perdió el control del partido en diez minutos fatales y terminó derrotado por 3-2. Ahora, espera una combinación de resultados casi milagrosa en la última fecha para ingresar a la Copa Sudamericana 2022.

Argentinos Juniors comenzó el partido ante Aldosivi hecho una tromba. Por algunos minutos, se vio una de las mejores versiones del equipo en el torneo. Ratificando lo hecho ocho días antes frente a Gimnasia, el equipo hizo un culto de la presión alta, el juego directo y la efectividad y ya ganaba 2-0 a los 24 minutos de partido. Ambos goles fueron cortesía de Gabriel Ávalos, quien también había dado la nota con su vuelta a las redes en el último compromiso. Ambos tantos, también, llegaron de jugadas casi calcadas: desborde por derecha y centro preciso a la cabeza del paraguayo. El primero vino de los pies de Florentín  el segundo de Carabajal, quien a esta altura del torneo se revela como el hombre más regular del plantel en la ofensiva.

El equipo tenía todo: dominio claro de las acciones, buenas sociedades en ataque, gol y efectividad. Sin embargo, casi cinco minutos después de su segundo gol, vio como comenzaba un partido totalmente diferente. A los 31, el ex Argentinos Gabriel Hauche puso el descuento tras una estupenda habilitación de Martín Cauteruccio. Sesenta segundos después, el mismo Hauche superó en velocidad a Franco Moyano. El ex San Lorenzo intentó frenarlo usando su brazo izquierdo y por eso vio la segunda amonestación. Esa expulsión fue el verdadero punto de quiebre del partido. 

Al perder el equilibrio en el medio el equipo quedó totalmente expuesto y descompensado. El ingreso de Kalinski no fue suficiente para volver a enhebrar la línea de volantes. La vocación ofensiva del equipo le impidió adaptarse a una modalidad que le permitiera cuidar el resultado parcial. Así, justo sobre el final de la primera parte, el ingresado Jonathan Zacaría puso el empate. Una vez más apareció la figura de la tarde-noche: Hauche le ganó de forma impecable la posición a Mac Allister y habilitó a su compañero, que venció a Lanzillota con un derechazo cruzado a colocar.

El empate, si bien previsible por el curso de las acciones, fue un baldazo de agua fría de cara al segundo tiempo. Pero todavía faltaba más. Milito salió a la cancha con los mismos 10 jugadores que habían terminado la primera parte. La tesitura del partido tampoco cambió y los problemas eran los mismos. Así, el 3-2 de Malcom Braida sobre los 60 minutos de juego tras una buena jugada colectiva no fue tan sorpresivo. Aldosivi dominaba el mediocampo y hacía sentir su ventaja numérica. Hauche seguía en una de sus mejores noches y se despachó con otra asistencia, que esta vez fue mucho más determinante. Dejó a su compañero solo ante Lanzillota justo antes de que caiga en posición adelantada. El volante se sirvió de una inoportuna pérdida de la vertical de Elías Gómez y puso cifras que serían definitivas en el partido.

La reversión del resultado hizo reaccionar al equipo y al entrenador. Minutos después llegaría una de las postergadas sustituciones en un equipo desarmado y cansado, aunque cuesta comprender por qué vinieron en cuentagotas considerando que el reglamento habilita cinco cambios. El ingreso de Coronel trajo nuevos bríos. Apenas cuatro minutos después de su entrada al campo, Argentinos tuvo una posibilidad inmejorable para empatar. Cuando el número 25 de la visita le ganó en velocidad a Coloccini, el central lo derribó en el área grande: penal indiscutible del que se hizo cargo Gabriel Florentín. Ratificando que este no era el partido de Argentinos, su definición fue sin escalas a la tribuna luego de una carrera poco ortodoxa. La derrota en el que al principio pareció un triunfo sencillo complica por demás al equipo en su objetivo de clasificar a la copa Sudamericana. Ahora deberá vencer a Sarmiento en la última jornada y esperar los resultados de Racing ante Godoy Cruz, Rosario Central ante Huracán, Unión frente a Colón y Gimnasia frente a Patronato. Todos esos encuentros están programados para jugarse en simultáneo el próximo sábado.